La última moda estúpida de este verano es de lo menos apetecible, interesante o saludable. Se trata de los “tatuajes solares” que muchos jóvenes lucen orgullosos a través de las redes sociales. Básicamente, fotos de personas que se han quemado (a propósito!!!) al sol con una plantilla sobre la piel para crear dibujos o tramas en diferentes tonalidades. “Inconscientes” que ignoran o “pasan” de los peligros de las quemaduras solares para la salud.
Una práctica que no sólo pone en riesgo la salud de quienes la practican sino también, la de todos los que inexplicablemente vean alguna diversión en esta ocurrencia y se apunten a la moda. Locos que no saben que las quemaduras solares pueden aumentar el riesgo a tener cáncer de piel aparte de que, sinceramente, quedan ho-rri-bles.
Según los expertos, los rayos ultravioleta pueden contribuir al envejecimiento prematuro de la piel, por eso es importante saber cómo relacionarse con ellos. Conocer bien nuestro tipo de piel (fototipo), usar el factor solar adecuado y controlar las horas de exposición directa al sol son algunas de las normas básicas.
Una pamela (y una cabeza bien amueblada para lucirla) es otra de las soluciones más recomendables.